La cirugía cosmética se realiza generalmente para corregir una anormalidad física o para mejorar una característica del cuerpo y así mejorar su apariencia. La cirugía estética es un campo muy amplio el cual puede ofrecer opciones como la cirugía reconstructiva para un paciente después de una quemadura o otros traumas físicos, pero también se puede utilizar para eliminar las arrugas, el aumento de mamas, o remodelar la nariz. En un pasado no muy lejano, esta se limitaba sólo a operar, algo que era absolutamente necesario para la salud y el bienestar del paciente; por ejemplo, cirugías de injerto de piel para las quemaduras graves, la reconstrucción de un ojo desplazado, la reparación de una fractura en la nariz o la mandíbula, eliminar cicatrices y hasta para tratar una marca de nacimiento en la cara. La cirugía cosmética se utilizó regularmente después de la Primera Guerra Mundial, ya que con el tratamiento de las heridas le devolvió la esperanza a los jóvenes soldados.